viernes, 27 de mayo de 2011

Mala imagen para los Mossos de Escuadra



La carga policial contra los manifestantes de la Plaza Catalunya ha comenzado esta mañana. Por aquí ha estallado el encontronazo previsto y no por la madrileña Puerta del Sol, donde acampan muchos más desde hace once días. La razón: Despejar de enseres, no de personas, el perímetro de la plazoleta, para que pudieran entrar los equipos de limpieza municipales y también para que el espacio fuera más expedito de cara a un posible triunfo mañana del Barça, en la liga final de la Champions.
Es sabido que, cuando gana el Barça, la entrada superior a Las Ramblas, a menos de cien metros de donde acampan los indignados, se llena hasta más no poder. También es bastante regular que, cuando esto sucede, haya disturbios en la zona, roturas de mobiliario urbano, de cristaleras de comercios y barricadas en toda regla, a manos de energúmenos que, paradójicamente, disfrutan así la victoria.
¿Dónde ha estado el error?
La televisión local y nacional en estos momentos hablan de, al menos, 15 heridos –entre ellos un mosso de escuadra (policía autonómica)- y de una carga desmedida de las fuerzas encargadas de garantizar el orden público. Se habla también de excusa para desalojar la plaza, pero lo que más “canta” son las imágenes: los bastonazos llueven en pantalla.
Con el ambiente en llamas como está ahora, cualquier entrada de la policía en el área de protesta sería contraproducente, aunque hayan ido con la misión de higienizar el suelo. Como les han retirado sus enseres –ordenadores, toldos y cazuelas-, sus dueños se han enfrentado y terminó todo en una batalla campal. A partir de las imágenes vistas en directo por la tele, los medios ultraizquierdistas que se dedican a cazar cargas policiales ya tienen trigo en mano.
Desde Barcelona, lamento que el estambre se haya roto aquí, por culpa de la torpeza de algún político, mal político en este caso.

Foto: María Salgado
Actualización 15:13: Los telediarios a esta hora dicen que se trata de un centenar de heridos. Manel Prat, de parte de la policía autonómica, recalca que negociaron por lo bajito con los manifestantes, pero las imágenes hablan de otra cosa. Ya se marcharon los Mossos de Plaza Catalunya y los manifestantes continúan allí, pero sin tiendas de campaña. Esta tarde habrá una asamblea general a las 19 horas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Era de de esperar en una Barcelona que a veces da la imagen de ser ingobernable en nombre de la libertad de expresion.Yo que no vivo alli estoy harto de ver los cataclismos en Canaletas cada vez mas a menudo.Lo de los indignados aun me confunde y tengo mis dudas.Un saludo:ROBERTO

Jorge Ignacio dijo...

yo también tengo mis dudas, Roberto. Habría que ver cuántos de ellos votaron al PP, algo que es bastante posible.

Anónimo dijo...

Ja,Ja!! Macho el tema "PP" te tiene obsecionado.Que no pasa nada,de hecho la alternancia de poder es buena y el bipartidismo es un ma lmuy unido a las democracias del primer mundo.a lo mejor una ideologia de entro-derecha nos es tan malvada como muchos creen.un saludo:ROBERTO

Jorge Ignacio dijo...

bueno, Roberto, creo que hablamos ya de gustos personales, entre la derecha y la izquierda, la izquierda de aquí, claro. Al margen de esos gustos,creo que la alternancia le hace mucho daño a esta país; es muy cómoda y no hace avanzar. Es como un torneo en el que árbitro deja ganar a uno u otro para que haya un equilibrio, y así todos contentos. Por eso el otro día hablaba de reminiscencias, porque esta España no difiere mucho de la anterior, salvo en que existe democracia, que ya es bastante, lo sabemos tú y yo. Pero el desarrollo del pensamiento a veces me parece estancado. Y te digo en confianza, sin que nadie se entere, que ahora mismo yo no votaría al PSOE, aunque me identifico más con la izquierda de aquí que con la derecha. El problema es que no tengo a quién votar. Grave problema en un país con una doce de partidos. Ah, también que conste: uno de mis mejores amigos vota al PP. Nos hemos ido muchas veces de copas y fandangos, tocando el tema y sin tocarlo. Eso es lo bueno, que no pasa nada. ¡Qué suerte tienen los españoles y cuánto han trabajado para que, por lo menos en la superficie, desaparezcan las rencillas!